En algunos casos, un dentista extrae un diente roto levantando el diente con un elevador y retirándolo con una pinza, mientras que en los casos en que un diente se rompe debajo de la línea de las encías, la extracción quirúrgica puede ser necesaria, dice Colgate. La extracción quirúrgica puede ser realizada por un dentista general o un cirujano bucal e implica hacer un pequeño corte en la encía para permitir la extracción del diente roto.
Para extraer un diente roto con unas pinzas, el dentista administra anestesia local y usa un elevador o pinzas para aflojar y extraer el diente, explica Falmouth Dental Associates. Este es el mismo procedimiento que se utiliza para extraer los dientes no rotos en la mayoría de los casos. Si bien las extracciones simples pueden causar algunas molestias, los analgésicos de venta libre suelen ser suficientes para aliviar el dolor.
Para la extracción quirúrgica en casos complejos, el diente puede romperse en pedazos para facilitar su extracción, informa Falmouth Dental Associates. Se utilizan puntos de disolución para cerrar la incisión en la encía. En algunos casos, se utiliza anestesia general o sedación leve además de la anestesia local. Los pacientes dentales pueden tener más dolor y molestias después de una extracción quirúrgica. Los dentistas a menudo recetan medicamentos más fuertes para el dolor, y el dolor generalmente desaparece después de varios días. La curación completa después de la extracción quirúrgica puede llevar de una a dos semanas.