Las opciones de tratamiento para la isquemia cardíaca, también conocida como isquemia miocárdica, incluyen medicamentos y ciertos procedimientos quirúrgicos para mejorar el flujo de sangre al corazón, según la Clínica Mayo. Factores del estilo de vida como dejar de fumar, comer una Una dieta saludable, mantener un peso saludable y hacer ejercicio también forman parte de un plan de tratamiento general.
Los medicamentos utilizados para tratar la isquemia cardíaca incluyen aspirina, nitratos, bloqueadores beta, bloqueadores de los canales de calcio y medicamentos para reducir el colesterol, según lo indica la Clínica Mayo. Los profesionales de la salud también pueden prescribir inhibidores de la enzima convertidora de angiotensina y ranolazina. Si es necesario un tratamiento más agresivo, es posible que el paciente deba someterse a una angioplastia y colocación de stent, un procedimiento en el que un cirujano inserta un catéter estrecho en la arteria estrechada e infla un globo para ampliarlo.
Otra opción es la cirugía de derivación coronaria, un procedimiento en el cual un cirujano crea un injerto de otra parte del cuerpo del paciente para permitir el flujo de sangre alrededor de la arteria estrechada. Los pacientes también pueden optar por una contrapulsación externa mejorada, que consiste en inflar los puños alrededor de las piernas para ejercer presión sobre los vasos sanguíneos y mejorar el flujo sanguíneo.
Los pacientes también deben seguir un estilo de vida saludable para el corazón que incluya limitar las grasas saturadas en la dieta, aumentar el consumo de frutas y verduras y disminuir el estrés, como lo indica la Clínica Mayo. Los pacientes también deben buscar tratamiento para condiciones de salud subyacentes como la diabetes y la presión arterial alta.