Use una mezcla de maicena y agua para hacer un refuerzo de tela hecho en casa. Combine 1/4 taza de maicena y 1 1/2 tazas de agua fría en una cacerola pequeña y revuelva hasta que quede suave.
Cocine a fuego medio hasta que la mezcla se espese y se vuelva translúcida. Retire la sartén del fuego y deje que la mezcla se enfríe a temperatura ambiente antes de usarla. Sumerja la tela en la solución enfriada y exprima el exceso. Use un paño seco o una toalla de papel para eliminar el exceso. Forme la tela de acuerdo con las instrucciones del patrón y deje que se seque al aire hasta que esté dura. Este método produce un acabado muy duro no permanente.