Los perros utilizan sus sentidos para adaptarse a nuevos entornos, así como para poner en práctica miles de años de crianza y entrenamiento selectivos. En general, los cachorros tienen más facilidad para adaptarse a las nuevas situaciones que los perros adultos. < /p>
Los órganos sensoriales de los perros les ayudan a procesar información sobre su entorno y permiten que las personas y los perros se comuniquen de manera no verbal, creando un entendimiento entre los dos. Aún se producen malentendidos entre el perro y el humano, pero en general los sentidos del perro aumentan su percepción de lo que se espera.
La evidencia sugiere que los primeros humanos criaron y entrenaron cachorros de lobo salvaje para realizar tareas como la caza y los deberes de los perros guardianes para ayudar a las familias a sobrevivir. Durante miles de años, los lobos llegaron a tener los rasgos que las personas requerían en sus perros y mascotas. De esta manera, los perros se adaptan a un nuevo tipo de vida.
