Para limpiar sus oídos de manera segura, lave la piel del exterior con agua y jabón, coloque gotas que disuelven la cera en un oído, espere 15 minutos, enjuague el oído con solución salina y repita con el otro. Este procedimiento de 45 minutos requiere jabón, agua, una toalla, una almohada, gotas para disolver la cera, bolitas de algodón y un kit de irrigación auditiva.
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Lave la piel
Lave la parte externa de cada oreja con agua tibia y jabón suave. Enjuague bien y seque la piel con una toalla.
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Inserte gotas que disuelven la cera
Acuéstese de lado con la cabeza sobre una almohada. Coloque varias gotas de solución de disolución de cera en su oído expuesto y manténgase de lado durante 15 minutos.
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Irrigue el canal auditivo
Coloque una bola de algodón en la entrada del canal auditivo y levántese. Abra un kit de irrigación para el oído con solución salina comercial, coloque una toalla sobre su hombro, retire la bola de algodón y enjuague el canal auditivo según las instrucciones de la caja del kit de irrigación.
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Seque la oreja
Seque la oreja con la toalla y repita el proceso de limpieza con la otra oreja. Deseche cualquier solución de riego no utilizada. Lave la punta de la bombilla de irrigación con agua tibia y jabón, deje que se seque al aire y guárdela.
