Un control remoto de radiofrecuencia funciona al enviar una señal de radio de un transmisor a un receptor, que activa los motores dentro del dispositivo controlado por radio. Un helicóptero de juguete controlado por radio, por ejemplo, solo Requiere un solo motor para hacer girar los rotores. Un carro de juguete usualmente tiene al menos dos motores: uno para hacer girar las ruedas y otro para girar el eje delantero de lado a lado, dirigiendo el carro.
El transmisor para un dispositivo controlado por radio es típicamente portátil. Utiliza una fuente de alimentación, como una batería, y tiene controladores, como joysticks o disparadores. Los controladores más simples no son más que un interruptor de encendido y apagado. Otros permiten giros a la izquierda y derecha, adelante y atrás y velocidad variable. Algunos aviones controlados por radio utilizan un pequeño motor a gas para girar la hélice y un transmisor de radio para controlar las aletas del ala y dirigir el avión. Veleros controlados por radio usan el viento para propulsión y un transmisor de radio para controlar el timón. La mayoría de los juguetes controlados por radio operan a 27 o 49 MHz, las frecuencias asignadas por la FCC para dispositivos de consumo como juguetes y puertas de garaje. Los fabricantes de juguetes a menudo hacen versiones diferentes de cada modelo utilizando diferentes partes del espectro de frecuencias, de modo que se pueden operar múltiples juguetes en las proximidades sin interferencia entre los transmisores.
