Los soldados de infantería británicos a menudo se llamaban Redcoats o Lobster Backs durante la guerra. En el momento de la Revolución Americana, estos nombres eran referencias despectivas a los brillantes abrigos rojos por los cuales los soldados británicos eran conocidos.
Los uniformes de colores brillantes eran una ventaja durante una batalla del siglo XVIII porque los mosquetes producían una espesa niebla de humo blanco cuando se disparaban. Esta nube hacía difícil distinguir a un compañero soldado de un enemigo. El ejército británico conservó el abrigo rojo como marca registrada durante más de 200 años. El término Redcoat es el más utilizado por los ciudadanos estadounidenses en el siglo XXI y se ha convertido en una amplia referencia para el pueblo británico.