Los tuareg, entre otros, han vivido en el desierto del Sahara durante miles de años. Antes de su desertificación, el área ahora ocupada por el Sahara era relativamente exuberante y también estaba más poblada que Ha sido durante los últimos siglos.
Aunque el Sahara es un área grande, que ocupa aproximadamente 3.5 millones de millas cuadradas en la parte noroeste del continente africano, ahora está muy poco poblada, principalmente por pueblos bereberes nómadas como los tuareg. Este duro paisaje tiene una larga historia humana que tal vez sorprenda a quienes suponen que la gente no podría sobrevivir en un clima así.
Los camellos son quizás una de las herramientas de supervivencia más importantes que tienen los habitantes del Sahara. Estos animales resistentes pueden viajar a través del paisaje arenoso y pueden sobrevivir por largos períodos sin tener acceso al agua. Los humanos, sin embargo, sí necesitan acceso al agua, y los tuareg han estado utilizando las mismas rutas a través del desierto durante años para maximizar el acceso a los suministros de agua mientras viajan. En algunos casos, estas rutas tienen cientos de años, lo que permite que cada generación sucesiva transmita información valiosa sobre la supervivencia. Estos son el tipo de técnicas que permiten a estas personas vivir en uno de los climas más duros del planeta.