Las mujeres musulmanas no solo pueden afeitarse, sino que también deben hacerlo. El código de higiene personal musulmán, Sunan al-Fitra, requiere que todos los musulmanes, ya sean hombres o mujeres, eliminen cualquier vello corporal del cuello hacia abajo, incluido el pelo que rodea la región genital y el ano.
Además de la eliminación del vello corporal, se recomienda a las mujeres musulmanas que eliminen cualquier vello facial anormal y que limpien las cejas, pero que no cambien su forma. La regla general es que si hay algún pelo que hace que una mujer sea fea, especialmente para su esposo, es para quitarla.