La temperatura de la astenosfera comienza en poco más de 1.600 grados Fahrenheit, pero no se eleva por encima de 6.700 grados F. Se encuentra debajo de la litosfera o corteza de la tierra y la parte más rígida del manto superior.
La astenosfera se encuentra entre 64 y 124 millas por debajo de la superficie de la tierra, pero puede sumergirse a 435 millas de profundidad.
El calor que se encuentra en la astenosfera es alto, pero no lo suficientemente alto como para hacer que las rocas de la astenosfera se derritan. Debido a esto, se encuentran en un estado sólido pero viscoso, lo que les permite fluir. Aunque solo se mueve centímetros por año, esta capacidad de flujo permite que la astenosfera flote las placas tectónicas que forman la corteza terrestre.
