Los tres tipos de ética incluyen ética descriptiva, ética normativa y metaética, explica el Departamento de Filosofía de Lander University. Cada tipo tiene un lugar en la funcionalidad de una sociedad.
La ética descriptiva es la moral de una sociedad. Las personas utilizan la ética descriptiva como una forma de juzgar acciones particulares como buenas o malas según el contrato social de una sociedad en particular. Es posible que las personas en un grupo tengan una moral diferente a las personas en otro grupo. La ética descriptiva también cambia con el tiempo. Por ejemplo, la aceptabilidad del racismo cambió en los Estados Unidos a lo largo de generaciones. La ética normativa implica lo que debería ser bueno o malo en una sociedad. La visión de lo que es una ética aceptable requiere subjetividad. La ética normativa entra en conflicto con la ética descriptiva a veces. Un ejemplo de ética normativa es el debate sobre el aborto. La metaética implica el examen de términos éticos, como justicia y moralidad, como conceptos amplios para una sociedad. También busca definir un término medio entre términos como bien y mal. El emotivismo, una parte de la metaética, implica el uso de una afirmación aparentemente objetiva como una respuesta emocional. Un ejemplo de metaética incluye cuestionar la existencia del libre albedrío en una sociedad.