Las variables macroeconómicas, o MV, son indicadores del estado general de la economía de un país. En los Estados Unidos, incluyen el Índice de precios al consumidor, la tasa de interés preferencial promedio, el índice Dow Jones y la tasa de inflación. El gobierno estudia los MV e intenta mantenerlos en ciertos niveles para que la economía funcione.
La macroeconomía mira la economía desde la perspectiva más amplia y estudia las tendencias generales para evaluar la salud relativa de la economía de un país determinado. La macroeconomía es importante para gobernar un país, ya que es el rol del gobierno central mantener la economía estable para que pueda tener lugar la actividad microeconómica. Los gobiernos pueden controlar la macroeconomía emitiendo dinero y determinando las políticas fiscales.
La Reserva Federal de los EE. UU. ha estado realizando un Análisis y Revisión de Capital Integral (CCAR) todos los años desde 2009. El CCAR es una prueba de resistencia para el sistema bancario de los EE. UU. Los 19 bancos estadounidenses más grandes son evaluados para ver si pueden prestar a la economía en caso de un escenario macroeconómico adverso.
Entre las variables macroeconómicas que la Reserva Federal utilizó para desarrollar el escenario de estrés para los bancos en 2011 se encuentran el Índice de Precios al Consumidor, el PIB real, el ingreso personal real disponible, la tasa de bonos del Tesoro a 3 meses, la tasa de desempleo, el Índice de Precios Nacional y Índice Dow Jones. El año siguiente, se agregaron los valores máximos, como la tasa hipotecaria y el índice de volatilidad del mercado.