Un estudio comparativo causal examina la relación entre una diferencia que existe entre los miembros de una población y las posibles causas de esa diferencia. Este tipo de estudio a menudo se realiza cuando el investigador no puede manipular los factores. conduciendo a una diferencia observada.
Cuando se busca establecer una relación de causa y efecto en un estudio comparativo causal, el investigador debe identificar dos grupos que sean similares en todos los aspectos, excepto la diferencia que se está estudiando. Establecer una relación entre la causa y el efecto implica el uso de argumentos lógicos y la persuasión. La aplicación del análisis estadístico está muy empleada en este tipo de estudios. Los estudios comparativos causales también se conocen como estudios ex post facto porque los eventos del experimento ya han ocurrido antes de que se realice la investigación.
La validez de los resultados de los estudios comparativos causales puede ser difícil de demostrar debido a la incapacidad del investigador para controlar la variable independiente. Los investigadores deben asegurarse de que los miembros de los grupos a estudiar sean miembros válidos de esos grupos. Pasar por alto otras diferencias invalida la conclusión del estudio. Una vez que se analizan los resultados de los estudios comparativos causales, se realiza una investigación experimental para validar los resultados siempre que sea posible.