El desarrollo de la personalidad es una transgresión a través del desarrollo cognitivo, social y moral, al tiempo que maduramos y comprendemos cómo las reacciones y las emociones afectan el bienestar personal. Varios pasos y etapas ocurren cuando la personalidad de una persona se desarrolla.
Durante el desarrollo de la personalidad, los niños piensan de manera diferente a los adultos. Por ejemplo, las emociones pueden ser difíciles de contener para los niños cuando están enojados o molestos, mientras que los adultos han aprendido habilidades de afrontamiento. Las relaciones sociales también pueden afectar el desarrollo de la personalidad. Cuando las personas están expuestas al abuso emocional, pueden volver a las etapas más tempranas del desarrollo de la personalidad.
El pensamiento moral también es un factor considerable en el desarrollo porque las lecciones aprendidas o los ejemplos expuestos durante la infancia pueden afectar la toma de decisiones y las consideraciones éticas de una persona en el futuro.