Algunos hábitos tradicionales de las monjas católicas incluyen vestimentas usadas por la Orden de Santa Clara, las Misioneras de la Caridad y las Hermanas de la Anunciación. El hábito de la Orden de Santa Clara es marrón con un velo negro. El hábito de las Misioneras de la Caridad, que es azul y blanco, está inspirado en el sari, que es una prenda tradicional para mujeres del sur de Asia. Las Hermanas de la Anunciación llevan hábitos blancos con velos negros y escapularios rojos.
Los hábitos tradicionales consisten en una túnica cubierta por un escapulario, capucha y velo. Algunas monjas tradicionales llevan un cinturón de lana, un rosario y un anillo especial que indican que la monja hizo un voto especial. Diferentes órdenes se adhieren a diferentes estilos de vestimenta que cambian con el tiempo.
Desde el Concilio Vaticano II, menos monjas usan el hábito tradicional completo. Un decreto llamado "Perfectae Caritatis" aconsejó a monjes y monjas a adaptar los hábitos religiosos de una manera más práctica. No les aconsejó deshacerse del hábito por completo, dejando la decisión a cada comunidad. En la época contemporánea, las personas a menudo pueden identificar a las monjas simplemente por una cruz de oro en un collar o alfiler. Algunos seguidores de otras religiones, como el budismo, el islamismo y el jainismo, también llevan hábitos o ropa religiosa especial.