Un eclipse solar es el resultado de la luna que se interpone entre la Tierra y el Sol. Durante un eclipse, la Luna proyecta su sombra sobre la Tierra. Un eclipse solar total solo puede ocurrir durante la fase de la luna nueva.
Hay cuatro tipos de eclipses solares: anual, parcial, híbrido y total. Los eclipses híbridos y totales implican una oclusión completa del disco solar, mientras que los eclipses parciales y anuales no bloquean completamente el sol. Los eclipses parciales no bloquean completamente el disco del sol, aunque la cantidad de sol que queda a la vista depende de la ubicación y las circunstancias de la vista. Un eclipse solar anual requiere que la luna pase centralmente frente al sol, pero ocurre cuando la luna está a una distancia demasiado grande para ocluir completamente el sol.
Un eclipse total ocurre cuando la luna es capaz de ocluir completamente el sol y ocurre en algún lugar de la Tierra aproximadamente cada 18 meses. Un eclipse híbrido comienza y termina como un eclipse anual, aunque la curvatura de la Tierra produce una oclusión total del Sol en su punto máximo. Se puede esperar que ocurra alguna forma de eclipse solar entre dos y cinco veces al año.