Los gatitos maullan para solicitar atención, expresar hambre o exigir atención. Los maullidos de los gatos se utilizan para comunicarse con los humanos. La única vez que un gato maulla a otro gato es cuando un gatito maúlla a su madre.
Un gatito puede maullar a su dueño porque está enfermo, solo, estresado, emocionado o quiere saludarlo. Un gatito también puede estar más inclinado hacia la vocalización dependiendo de su raza. Por ejemplo, algunas razas de gatos, como los siameses, son más característicamente vocales. Los gatitos también pueden ser condicionados conductualmente para maullar más frecuentemente dependiendo de las acciones de sus dueños. Un dueño refuerza el maullido de un gatito con golosinas, juguetes o atención. Esto hace que el animal maulle con más frecuencia para obtener lo que quiere.
La longitud, el tono y el tono del maullido de un gatito también pueden expresar los deseos del animal. Un maullido corto es la forma que tiene un gatito de saludar a su dueño, mientras que varios maullidos expresan emoción. Un maullido de tono medio es una petición de comida o atención, mientras que un maullido largo y prolongado es una demanda de algo. Un maullido largo y grave es una queja, mientras que un maullido largo y agudo se usa para expresar enojo o dolor. Los propietarios nunca deben ignorar o castigar a un gatito maullando con fuerza física o rociándolo con agua. Esto hace que los gatitos desconfíen de sus dueños. El cuidado veterinario puede ser necesario si un gatito maúlla por ninguna razón en particular.