El Nuevo Testamento de la Biblia otorga gran importancia a la reunión y al intercambio del mensaje cristiano. La iglesia es importante para un cristiano, por lo que no solo puede desarrollar una relación con Dios, sino también con otros cristianos.
El acto de asamblea es un tema común en el Nuevo Testamento. Los apóstoles viajan de pueblo en pueblo ganando conversos y creando pequeños grupos o iglesias. Los conversos luego usan su nuevo conocimiento para predicar a otros y crear más iglesias.
Asistir a una iglesia no solo le da a los cristianos la oportunidad de compartir creencias, sino que también proporciona una medida de responsabilidad. Interactuar con un oficial de la iglesia, como un pastor o sacerdote, de manera regular mantiene las enseñanzas del cristianismo en primer plano. Un cristiano que solo es responsable ante sí mismo es más propenso a deslizarse y cometer pecado.
Otros cristianos señalan el hecho de que la Biblia se refiere a la iglesia como la esposa de Jesús, a quien debe ser fiel. Si Jesús debe ser fiel a la iglesia, ¿cómo puede un cristiano hacer algo diferente?
La iglesia ha desempeñado un papel importante al mantener viva la historia de Jesús cuando los poderes políticos hubieran preferido que se eliminara. Al preservar las Escrituras y al proporcionar un lugar para la reunión y la oración, la iglesia sigue desempeñando un papel importante en la vida de los cristianos.