Las chinches de cama no tienen patas que estén adaptadas para saltar como lo hacen los saltamontes y las pulgas. Tampoco tienen alas, no pueden volar y dependen totalmente del rastreo y la escalada para moverse.
Para que las chinches de cama se muevan del piso a la cama, necesitan escalar cualquier mueble cerca de la cama o subir las patas de la cama. Son conocidos por trepar por las paredes hasta la altura del techo y caer sobre camas o muebles circundantes. Esta situación puede hacer que parezca que las chinches pueden saltar, aunque son físicamente incapaces de hacerlo.
Las chinches son insectos que se alimentan de sangre y pueden esconderse en cualquier lugar de la casa, incluso en las camas. Las chinches tienden a ser más activas durante la noche, pero también pueden picar durante el día. Los insectos prefieren alimentarse de sangre humana. No son carreras de la enfermedad; sin embargo, sus picaduras causan irritación de la piel que puede provocar reacciones severas en algunas personas.