Las avispas africanas conservan sus aguijones después de golpear a una persona. Este hecho, junto con su comportamiento agresivo, significa que pueden picar a una persona más de una vez. Esto es especialmente peligroso para cualquier persona alérgica a las abejas, avispas o avispones.
A partir de 2014, ha habido un aumento en los avispones africanos que pican a las personas, los ataques pueden evitarse. Si alguien nota uno o más de ellos en un jardín o mientras camina, esa persona debe tener cuidado. Molestar al insecto puede provocar un ataque. Si es posible, la persona debe abandonar el área en la que se ven los avispones africanos.