Los geckos leopardo se distribuyen entre desiertos de roca y praderas áridas en Afganistán, noroeste de India, Pakistán, Irán e Irak. Pasan sus días en hoyos y grietas evitando el calor del sol y salen Noche para cazar en el suelo.
A diferencia de otros geckos, los geckos leopardo carecen de la lámina adhesiva necesaria para adherirse a las superficies y trepar. En su lugar, tienen pequeñas garras al final de sus dígitos, útiles en ambientes arenosos. Por esta razón, los geckos leopardo son principalmente criaturas que habitan el suelo y rara vez escalan. En la naturaleza, los geckos leopardo comen otras lagartijas, arañas, insectos e incluso escorpiones, ya que no se ven afectados por el veneno de escorpión.