La torre inclinada de Pisa está hecha de mármol blanco extraído de montañas cercanas a la ciudad. La torre comenzó su famosa inclinación sobre la época en que se construyó la segunda historia. Le tomó 199 años completar la torre.
El motivo de la inclinación de la torre es el suelo blando que hay debajo y el hecho de que los constructores no sabían cómo crear una base firme para mantener el nivel del edificio y la plomada. Aunque se han realizado esfuerzos para evitar que la torre se caiga, la inclinación se considera una atracción turística y se mantiene. La torre, cuyo arquitecto era Bonanno Pisano, se suponía que era el campanario de la catedral de Pisa.
