Un átomo está formado por tres partículas llamadas protones, neutrones y electrones. Un átomo es la forma más básica de la materia y no puede descomponerse más.
Los protones y los neutrones se unen en el centro del átomo para formar el núcleo. Los electrones orbitan el núcleo. Estos electrones están unidos al núcleo por una fuerza electromagnética. Los protones tienen una carga positiva, mientras que los electrones tienen una carga negativa. Los neutrones no tienen carga. Los protones y los neutrones se pueden dividir en partículas llamadas quarks. Los electrones no pueden descomponerse más porque son partículas fundamentales. Los átomos son los componentes básicos de la materia. Los átomos pueden unirse para formar moléculas que constituyen la mayor parte de la vida. Todos los elementos que se encuentran en la tabla periódica están formados por átomos. Cada átomo tiene su propio nombre, masa y tamaño. Los átomos pueden estar presentes en varios estados de la materia, como un gas, líquido o sólido. Los átomos tienden a moverse muy rápido en forma de gas porque las moléculas no son muy compactas. En formas sólidas, los átomos no pueden moverse en absoluto porque las moléculas están empaquetadas muy juntas. Los líquidos dejan espacio para el movimiento, pero no tanto como los gases.