Un metro cúbico de tierra puede variar en peso de aproximadamente 2,000 a 2,700 libras. Varias variables, como la estructura orgánica, la textura, el grano y el nivel de humedad, influyen significativamente en el peso del suelo. p>
El nivel de humedad es, con mucho, el factor de peso más importante. El suelo arenoso tiende a drenar mejor el agua y, por consiguiente, es más liviano, y el suelo con un mayor contenido de arcilla absorbe más agua y tiene más peso. Los granos en arcilla también son pequeños y compactos, lo que aumenta su tendencia a atrapar la humedad. Para el mejor crecimiento de las plantas, los suelos ricos en arcilla requieren asistencia de drenaje, y los suelos arenosos y gruesos requieren más riego.