Algunas de las desventajas de la integración económica regional incluyen un desplazamiento de la fuerza laboral, menos eficiencia en el comercio, la creación de barreras comerciales para los no miembros y la pérdida de la soberanía en cierta medida. La integración económica es, sin embargo, se considera clave para el desarrollo internacional, ya que rompe varias barreras comerciales entre los estados miembros.
Uno de los inconvenientes de la integración económica regional es que fomenta un cambio en la fuerza laboral. Si, por ejemplo, una región en particular ofrece oportunidades lucrativas, la mayoría de los profesionales están obligados a mudarse de sus países de origen al país con mejores oportunidades. Esto puede crear nuevos desafíos para el país nativo, ya que trata de competir con los demás.
Otro inconveniente es que la ineficiencia del comercio puede surgir. Por ejemplo, si un país tradicionalmente realiza comercio con un país en particular, su comercio puede verse obligado a detenerse si se establecen nuevas leyes que impiden que los países negocien con otros que no pertenecen a la unión económica. Los países dentro del sindicato pueden ofrecer precios más bajos o pueden ser demasiado caros, lo que dificulta el comercio o es menos lucrativo.
Una vez que las nuevas leyes regionales entren en vigor, los países miembros pueden perder su soberanía en ciertos asuntos. Las nuevas leyes pueden hacer que todos los países consulten y creen un consenso antes de hacer cosas nuevas, y esto puede considerarse como una pérdida de soberanía.