Las características definitorias de un cuento de hadas incluyen un principio y un final típicos, elementos mágicos, personajes buenos y malos, escenarios encantados, apariciones en grupos de tres o siete, criaturas fantásticas y un problema explícito que finalmente se resuelve. Estos elementos clave se combinan en la historia para impartir una lección duradera a sus lectores.
Un cuento de hadas es una narración corta considerada como literatura infantil clásica. A menudo se introduce con la frase convencional "érase una vez". La historia generalmente se desarrolla en un reino lejano o en un bosque, donde los personajes humanos interactúan con seres mágicos y místicos. El lado bueno finalmente triunfa sobre el mal, y se cumple la promesa de un final feliz para siempre.