Si el papel está en buenas condiciones, se puede pintar sobre el papel tapiz siguiendo unos simples pasos. Para obtener los mejores resultados, Benjamin Moore recomienda comenzar con la preparación de superficie requerida. Comience por minimizar las posibilidades de que el papel se caiga agregando adhesivo a las piezas sueltas y reemplazando las áreas dañadas.
La eliminación del papel tapiz puede causar daños inesperados en las paredes. Si el papel tapiz está en buenas condiciones y no tiene signos de falla de adhesión, no hay razón para invertir tiempo y esfuerzo en retirarlo antes de pintar paredes.
El lijado de las costuras del papel tapiz evita que se noten demasiado. Si las costuras están rotas, Resene Popular Paint Systems aconseja pegarlas aplicando pegamento en ambas caras y dejándolas reposar durante al menos 20 minutos. Luego, apriételos firmemente o gírelos para que queden planos. Para sellar los bordes y evitar que el papel se despegue más tarde, debe aplicarse una línea delgada de masilla transparente alrededor del perímetro de las paredes en las uniones de las juntas donde el papel se encuentra con el piso y el techo.
Alise la superficie del papel muy texturizado para que no se vea a través de la pintura cubriéndolo con una fina capa de salpicadura. Para detener cualquier agujero en el papel tapiz, primero presione en los alrededores con el mango de una espátula para que no quede ningún bulto en la superficie.
Selle los adhesivos dentro del papel para mantenerlos alejados de la humedad de la pintura, cubriendo primero toda la superficie de las paredes con una capa de imprimación a base de aceite. Si aparecen pequeñas burbujas después de la primera capa de pintura, córtelas con una cuchilla afilada y pegue los bordes antes de aplicar la capa final. Debido a que normalmente la humedad en la pintura de látex es la que causa burbujas o peladuras al aflojar el pegamento del papel tapiz, asegúrese de pintar sobre el papel tapiz utilizando solo pintura a base de aceite.
