El primer paso para cuidar un tatuaje es dejar el vendaje puesto por lo menos dos horas después de que haya terminado. Esto es esencial porque las bacterias en el aire pueden causar una infección. La envoltura de Saran se debe quitar y reemplazar con una venda transpirable. Después de retirar el vendaje, es importante lavar el tatuaje con agua tibia y un jabón líquido antimicrobiano o antibacteriano suave.
Limpie y enjuague el área a fondo para eliminar la sangre, el plasma y la pomada. Evite utilizar cualquier tipo de toallita o esponja. Después del lavado, use una toalla limpia o una toalla de papel para acariciar suavemente el área hasta que esté completamente seca. A continuación, aplique una película delgada de ungüento, idealmente un ungüento enriquecido con vitaminas A y D.
Después de cinco días de aplicar el ungüento, es seguro usar una loción sin tinte ni perfume para mantener el tatuaje húmedo. Asegúrese de limpiar el tatuaje sobre una base regular. La raspadura es normal, siempre que no sea excesiva. Aplique una toalla limpia, tibia y húmeda en el área de la costra una o dos veces al día para que las costras se caigan naturalmente. Ducharse con un tatuaje es seguro, pero evite sumergirlo en agua durante las primeras tres semanas.