Para que la pintura se seque correctamente, las temperaturas deben estar por encima de los 45 o 50 grados Fahrenheit, dependiendo del tipo de pintura. Las pinturas a base de solventes requieren temperaturas de 45 F o más, mientras que las pinturas de látex Requiere temperaturas de 50 F o más altas. Consulte las instrucciones del fabricante para obtener instrucciones específicas de pintura.
La preocupación por las pinturas a base de solventes a bajas temperaturas es el engrosamiento, que hace que la pintura se aplique más y que la brocha se espese. Esto causa tiempos de secado más lentos, lo que hace que la pintura se corra, se hunda o se arrugue. La pintura más gruesa también conduce a una menor cobertura de cada galón de pintura, lo que reduce su cobertura general. Las pinturas a base de disolventes también se secan mediante oxidación, por lo que la cantidad de luz solar disponible durante el día también es una consideración importante.
Por debajo de los 50 F, las pinturas de látex se secan a un ritmo mucho más lento, lo que puede causar que la pintura falle prematuramente, ya que no se adhiere adecuadamente a la superficie. El problema se agrava cuando la humedad es alta. Al pintar en días húmedos, asegúrese de que la temperatura esté por encima de los 50 F y que el proyecto finalice al menos 2 horas antes de la puesta del sol para permitir un tiempo de secado adecuado. Algunos fabricantes ofrecen pinturas de látex que pueden secarse a temperaturas tan bajas como 36 F, lo que es ideal para climas más fríos o para pintar durante los meses más fríos. Al elegir la pintura para un proyecto, tenga en cuenta las temperaturas actuales y lea las instrucciones del fabricante para determinar la pintura adecuada para el trabajo.