Los elfos no son reales y caen en la categoría de criaturas mitológicas y folclore. Estas criaturas están relacionadas con otros mitos como las hadas y los duendes. La palabra "elfo" proviene de la palabra "alfar", que apareció en poemas islandeses alrededor de 1000 dC
Los ciudadanos de Islandia tienen una relación única con la creencia en los elfos. Sus historias y cuentos cautelares sobre elfos se han transmitido generación tras generación, culminando en la creencia generalizada de que los elfos invisibles se entrometen en los asuntos del hombre. Los elfos son acusados de robo de bebés, averías mecánicas y accidentes inexplicables. La Comisión de Carreteras y Costas de Islandia incluso ha desarrollado una placa, una respuesta estándar para los residentes y preguntas de la prensa sobre la participación de los elfos en incidentes diarios.