Hay algunas plantas de interior que son tóxicas para los gatos, las orquídeas son seguras. No es recomendable permitir que los gatos ingieran flores y plantas de interior, pero las orquídeas no causan daño. Los pesticidas o fertilizantes usados en las plantas podrían causar efectos secundarios dañinos.
Aunque muchas plantas de interior, incluidas las orquídeas, el bambú y los cactus navideños, no son tóxicos para los gatos, es mejor mantener a los felinos curiosos lejos de las plantas de interior y de las flores recién cortadas. Los pesticidas y fertilizantes utilizados en las plantas pueden ser peligrosos. Una manera fácil de mantener al gato aún más curioso lejos de las plantas de interior es rociar una pequeña cantidad de canela o cayena sobre las hojas.