No se recomienda el uso de blanqueador con cloro como un choque para la piscina, ya que reduce el nivel de pH de la piscina. Esto puede provocar problemas de algas y degradar el revestimiento de la piscina.
El uso de cloro para eliminar las algas y otros problemas es solo una parte de la solución. Es principalmente un desinfectante para la piscina. El uso excesivo de lejía reduce el nivel de pH de la piscina, lo que puede promover el crecimiento de algas y dañar la piscina, causando peligro para sus usuarios.
Mantener la química del agua de la piscina es la forma más efectiva de limpiar una piscina. Mantener los niveles correctos de pH, la alcalinidad y la dureza del calcio al usar la lejía para tratar áreas problemáticas y desinfectar el agua es el método más seguro para la limpieza de piscinas.