¿Qué países siguen usando DDT?

A partir de 2015, nueve naciones utilizan el DDT para controlar los brotes de malaria. Estos incluyen países del África subsahariana, como Etiopía, Sudáfrica, Uganda y Swazilandia. India y Corea del Norte también usan DDT para combatir la malaria.

El DDT fue un plaguicida ampliamente utilizado hasta 1972. La Agencia de Protección Ambiental de los Estados Unidos prohibió el DDT debido a las preocupaciones sobre su impacto en el medio ambiente y la salud humana. El pesticida tarda más de 15 años en descomponerse, y los científicos continúan encontrando el DDT en el entorno estadounidense a partir de 2015. El DDT, un probable carcinógeno, daña el hígado, los sistemas reproductivos y los sistemas nerviosos. Los estadounidenses están expuestos al DDT al comer pescado o vegetales contaminados que crecen en suelos contaminados. Los alimentos importados de países que usan DDT también pueden estar contaminados. Los bebés pueden estar expuestos a través de la leche materna contaminada. El DDT es bioacumulativo, lo que significa que las cantidades del producto químico aumentan la cadena alimentaria.

Según el Convenio de Estocolmo de 2001, un tratado respaldado por las Naciones Unidas que busca prohibir ciertos pesticidas, el DDT solo se permite para controlar el paludismo. La malaria es una enfermedad transmitida por mosquitos que mata a casi un millón de personas, en su mayoría niños, en el África subsahariana cada año. Más de 100 países firmaron el Convenio de Estocolmo. Además de los nueve países que admiten usar DDT, otros seis se han reservado el derecho de usar DDT para combatir la malaria, incluida China.