El óxido o los residuos atrapados entre la válvula de aleta y la parte inferior del tanque es la causa más frecuente de un tanque de inodoro que no se llena. Una válvula o un sello defectuoso también es común. Este problema suele ir acompañado del flujo continuo y ruidoso de agua del tanque al recipiente.
Si hay algo que impide que la válvula de la aleta se cierre completamente, o si la válvula o el sello están dañados, el inodoro se vacía continuamente, haciendo que el tanque se vacíe a la misma velocidad que se llena; en este caso, el desagüe del recipiente normalmente permanece cerrado, lo que hace que el recipiente se desborde hasta que el agua entrante se cierra. Un asa que está atascada y abierta también causa que el tanque se drene continuamente, aunque esto generalmente es más fácil de arreglar. Si hay agua en el piso del baño, la causa puede ser un tanque de inodoro agrietado que requiere reemplazo; si el mecanismo entre la bola flotante y la válvula de llenado está roto o mal ajustado, el tanque puede dejar de llenar prematuramente; Si hay algún problema con el suministro de agua del tanque, como un bloqueo o una tubería congelada, el tanque se llena muy lentamente o no se llena en absoluto.