Los hornos generan calor, y los motores de los ventiladores impulsan los ventiladores que distribuyen el calor por toda la estructura. Deben ser lo suficientemente potentes para enviar calor a toda la casa y lo suficientemente duraderos para que se enciendan y apaguen constantemente. p>
Los hornos distribuyen el calor a través de las casas usando uno o más ventiladores. Si bien son algo menos eficientes que las calderas, su simplicidad aún las convierte en una opción de calefacción popular. Gran parte de su ineficiencia se debe al hecho de que el aire caliente se enfría más rápido que el agua caliente, pero algunos también se deben a sus ventiladores, que requieren motores potentes para girar.
Los motores de los ventiladores generalmente funcionan con una conexión eléctrica independiente, por lo que los propietarios de viviendas que instalan un nuevo horno deben asegurarse de tener acceso a una toma eléctrica. Para sistemas especialmente grandes, puede ser necesaria una línea dedicada. Además, un sistema de horno único a menudo tiene varios motores sopladores, cada uno de los cuales requiere un suministro suficiente de electricidad.
Las partes móviles generalmente se rompen con más frecuencia que las partes no móviles, y los motores sopladores y los componentes a los que se conectan no son una excepción. Pequeños defectos en los ventiladores pueden causar una rotación desigual, lo que puede forzar un motor con el tiempo, por lo que revisarlos en ocasiones puede evitar costosas facturas de reparación. Los motores de los sopladores suelen estar conectados a una resistencia para cambiar la velocidad de los ventiladores conectados, y esta resistencia puede degradarse y romperse con el tiempo.