En el poema "I, Too, Sing America" de Langston Hughes, el orador habla de ser discriminado por el color de su piel. El orador habla de un sueño que tiene en el que no será juzgado por su raza.
En el poema, el orador afirma que también es estadounidense, pero que el país se avergüenza de él. Durante el período en que fue escrito, los afroamericanos fueron tratados como ciudadanos de segunda clase y fueron sometidos a las leyes de Jim Crow.
Al continuar afirmando que también es estadounidense, el orador le está dejando saber a la audiencia que es igual a los demás y que debería recibir las mismas libertades que los estadounidenses blancos.