Las novias usan ligas porque los invitados a la boda creían que era buena suerte recibir un pedazo del vestido de la novia. Esta tradición se remonta al siglo XIV. Los invitados masculinos a veces apresuraban a la novia después de la ceremonia de la boda para obtener piezas del vestido o la liga, de modo que la novia lanzaba su liga a los invitados masculinos para mantener su vestido intacto.
Esto podría llevar a un vestido roto oa que la novia se lesione. Para evitar esta situación, las novias comenzaron a quitarse la liga y arrojarla a la multitud de invitados masculinos. En este momento, la liga también simboliza la consumación.
Hoy en día, es costumbre que el novio retire la liga de la novia y la arroje a sus padrinos de boda. Una novia lleva la liga en la pierna derecha.