Paraguay es famoso por ser uno de los primeros países sudamericanos en establecer la independencia del gobierno colonial. En 1811, Paraguay logró su independencia de España después de más de 250 años de gobierno colonial.
España colonizó Paraguay a principios del siglo XVI. Juan de Salazar estableció una ciudad donde ahora se encuentra Asunción, y los colonos convirtieron a los indígenas en el catolicismo. La corona española esperaba usar la colonia como un recurso para recolectar recursos preciosos, especialmente oro y plata. Sin embargo, estos recursos no se encontraron, por lo que España puso poco esfuerzo en desarrollar Paraguay. En cambio, se mantuvo vagamente en la conciencia del gobierno central.
Cuando Napoleón derrotó a los españoles en 1811, los ciudadanos paraguayos utilizaron la interrupción del gobierno para iniciar un movimiento hacia la independencia. En los años siguientes se produjeron una serie de dictaduras y guerras en todo el país, incluidas guerras especialmente sangrientas a mediados del siglo XIX que llevaron a la muerte de dos tercios de la población masculina adulta. Estas dictaduras persistieron hasta bien entrado el siglo XX; en 1989, la dictadura militar dirigida por Alfredo Stroessner fue derrotada y el país avanzó hacia el gobierno democrático. Sin embargo, este período aún ha mostrado una gran inquietud política, incluidos varios intentos de golpe de estado para derrocar al gobierno. A partir de 2014, el país mantiene elecciones democráticas libres a pesar de los conflictos políticos.
