La cantidad de energía utilizada para acondicionar el aire de un edificio depende del tamaño y la distribución del edificio y de la calificación de eficiencia energética estacional del acondicionador de aire. Un contratista de calefacción y aire acondicionado con licencia puede estimar cuánta energía utiliza un sistema determinado para enfriar un edificio determinado.
El número de clasificación de eficiencia energética estacional, o SEER, mide la eficiencia de un acondicionador de aire. El número SEER es la relación entre la cantidad de calor que el acondicionador de aire puede eliminar en una hora, según lo medido en unidades térmicas británicas, y la cantidad de energía que consume el acondicionador de aire mientras elimina ese calor, medido en kilovatios-hora. Cuanto más alto es el SEER, más eficiente es el aire acondicionado. Otros factores que pueden afectar la cantidad de energía consumida son el aislamiento y la distribución del edificio, el uso de cubiertas de ventanas para bloquear la luz solar y el uso de termostatos programables para garantizar que el sistema funcione solo cuando sea necesario.