El tamaño estándar de las llaves americanas, desde las más grandes hasta las más pequeñas y medidas en pulgadas, son 5/8, 19/32, 9/16, 1/2, 7/16, 3/8, 11/32 5/16, 9/32, 1/4, 7/32, 3/16, 5/32 y 1/8. Las llaves están disponibles en conjunto o individualmente.
Un conjunto pequeño tiene entre seis y 10 llaves, que varían de 5/16 a 1 pulgada de tamaño. Las llaves estándar están disponibles en paquetes de incrementos de 1/16 pulgadas hasta 1 1/2 pulgadas. La longitud de la herramienta varía proporcionalmente al tamaño, desde 4 pulgadas a 2 pies; una herramienta más larga maximiza la fuerza requerida para apretar una tuerca más grande y viceversa. La longitud también ayuda a evitar el desprendimiento de los pernos en caso de una aplicación de presión excesiva.
Dos llaves de un tipo y tamaño similares pueden tener etiquetas de precios muy variadas, ya que el proceso de fabricación y los materiales utilizados para crear cada una de ellas son diferentes. Las llaves de vanadio o de aleación de cromo tienden a ser de la más alta calidad y, por lo tanto, las más caras, mientras que las llaves de chapa y molibdeno son más económicas. Las llaves estampadas de chapa metálica tienden a ser voluminosas y son mejores para ambientes donde se requiere resistencia. También son la mejor opción para trabajos livianos poco frecuentes. Sin embargo, para un uso regular como las aplicaciones de automóviles, las herramientas costosas son una mejor inversión.