Se cree que el juego de Mancala se originó en África. Los primeros juegos se jugaron sacando hoyos de la tierra y utilizando piedras o conchas marinas como piezas móviles. Con el tiempo, se crearon tableros de juego, y hechos de madera, arcilla u oro.
El término "Mancala" es árabe, que significa "juego de transferencia". Es el único juego antiguo con un nombre árabe que todavía existe, lo que sugiere que el juego se originó en Arabia o existió en esa parte del mundo durante miles de años. Desde la creación del juego, varias versiones se han desarrollado a lo largo del tiempo.
Los países con diversas versiones del juego incluyen India, Sri Lanka, Indonesia, Malasia y Filipinas. Hay muchas variaciones en el juego, que se han traducido en varios nombres diferentes debido a su popularidad entre las tribus africanas. Ejemplos de nombres africanos incluyen Wari, Ware, Walle, Awari, Aware y Awaoley. Wari es considerada la forma más popular de Mancala en todo el mundo.
Aunque muchas culturas juegan a este juego con fines recreativos, algunas regiones asocian a Mancala con la religión. En las Indias Occidentales, por ejemplo, el juego se jugaba en una casa mientras se lamentaba una muerte, ya que se pensaba que el espíritu del difunto encontraba diversión observando hasta el entierro de su cuerpo.