Las extranets agregan valor a las organizaciones al permitirles colaborar libremente y comunicarse de manera más efectiva con socios, clientes y clientes; sin embargo, pueden plantear ciertas amenazas de seguridad para una organización si no se implementan adecuadamente. En el mercado de empresa a empresa, una red externa puede dar a la organización una ventaja significativa a sus competidores al ahorrarles dinero al reducir los costos generales y simplificar funciones empresariales.
Una extranet mejora en gran medida la flexibilidad al hacer que las aplicaciones y la información estén disponibles para los clientes, clientes y socios, permitiendo que todas las partes involucradas operen con comodidad. Dado que a todos los asociados de la organización se les ha otorgado acceso directo a la información en la red, la productividad y la eficiencia mejoran porque las tareas que inicialmente se realizaron de forma manual se automatizan, lo que hace que los cuellos de botella sean cosa del pasado y aumente significativamente la productividad.
Si se implementa correctamente, una extranet puede ayudar a mejorar la seguridad de una organización al crear diferentes niveles de acceso, y así controlar fácilmente quién puede acceder a los datos de la empresa. Sin embargo, las redes externas también pueden hacer que los sistemas de la empresa sean vulnerables a las brechas de seguridad, ya que brindan acceso externo a bases de datos y sistemas internos. Otra desventaja importante de las extranets es que son costosas de implementar. Las organizaciones deberán asumir los costos de software, hardware, mano de obra y otros costos asociados, como la capacitación de empleados y afiliados externos para utilizar la extranet. A pesar de que los costos iniciales iniciales son altos, una organización puede experimentar reducciones de costos en áreas de gastos a largo plazo.