La economía y la educación económica son importantes para proporcionar a las personas información valiosa sobre el funcionamiento de los mercados nacionales y extranjeros, lo que les permite tomar decisiones razonadas y racionales para obtener beneficios financieros a corto y largo plazo. El estudio de la economía también permite a las personas aprender a administrar y utilizar de manera más eficaz los recursos limitados y de miedo, como el tiempo y el dinero. Estudiar economía proporciona a las personas diferentes niveles de educación financiera, lo que les permite administrar sus propias finanzas de manera efectiva e incluso asesorar a otros en materia de planificación y gestión financiera.
El estudio de cómo funcionan los mercados permite a las personas comprender conceptos financieros básicos, como la oferta y la demanda, así como transacciones financieras más complejas y complejas. Además de adquirir conocimientos financieros, el estudio de la economía proporciona a las personas habilidades educativas y cognitivas, como la capacidad de tomar decisiones razonadas y racionales, que también son valiosas en otras áreas de su vida personal y profesional. Las habilidades para la toma de decisiones adquiridas al estudiar economía, por ejemplo, también son valiosas para ayudar a las personas a tomar otras decisiones, como apoyar o no las políticas públicas. Mientras que algunas personas que estudian economía utilizan su conocimiento para obtener beneficios personales, otras se dedican a profesiones, como la banca y el análisis de mercado, que ayudan a otras personas a aprender a administrar sus finanzas.