Las microondas son radiación electromagnética, y son producidas por un campo eléctrico que excita a un electrón, causando la emisión de una onda de campos magnéticos y eléctricos. Si la longitud de onda es de aproximadamente 0.12 pulgadas a 12 pulgadas y la frecuencia es de 3 gigahertz a 30 terahertz, la onda es un microondas.
La capacidad de producir radiación de microondas en circunstancias y tiempos específicos hace posible una serie de tecnologías. Las tecnologías que incluyen radar, transmisión de datos y control remoto de señales e interruptores dependen de las microondas. El radar funciona produciendo una señal de microondas que se refleja en un objeto como un avión y detecta la señal reflejada, revelando la ubicación del objeto. Este principio también se ha utilizado en los altímetros, dispositivos para hacer cumplir los límites de velocidad, radar meteorológico y detectores de movimiento.
La radiación de fondo producida como resultado del Big Bang, todavía detectable en la actualidad, proporciona una rica fuente de información sobre el período inicial de la existencia del universo. Esta radiación, llamada radiación de fondo de microondas cósmica, está presente en todo el universo. A diferencia de la mayoría de las formas de radiación, no proviene de una fuente específica. El mapeo de las diferencias de temperatura de esta radiación ha sido útil para descubrir la ubicación y la composición de grandes estructuras astronómicas fuera de nuestra galaxia.