Para eliminar el olor a gasolina, rocíelo con bicarbonato de sodio, frótelo con jabón para lavar platos, enjuáguelo, aplique una pasta de bicarbonato de sodio y agua, y enjuague nuevamente. Este procedimiento de 1 hora requiere paños de microfibra, bicarbonato de sodio, jabón para lavar platos, una esponja, agua, un tazón y un recipiente de plástico.
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Seque y rocíe el área afectada con bicarbonato de sodio
Seque el área afectada con un paño de microfibra para eliminar la gasolina residual, luego rocíe con bicarbonato de sodio. Deje el bicarbonato de sodio en su lugar durante una hora. Mientras espera, saque un paño de microfibra, ábralo y colóquelo sobre una superficie plana. Manténgalo afuera hasta que la gasolina se evapore.
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Inspeccione el área
Vierta el bicarbonato de soda en un recipiente. Si permanece el olor a gasolina, aplique más bicarbonato de sodio y espere otra hora. Deseche el bicarbonato de sodio usado y enjuague el recipiente.
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Aplique jabón para platos
Rocíe 2 cucharadas de jabón líquido suave sobre la zona afectada, frótela durante 5 minutos y luego sumerja el área en agua caliente durante 30 minutos.
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Aplique una pasta de bicarbonato de sodio
Coloque varias cucharadas de bicarbonato de sodio en un tazón y agregue suficiente agua tibia para hacer una pasta espesa. Extienda la pasta sobre el área maloliente y déjela allí hasta que se seque. Cepille la pasta seca de nuevo en el recipiente y deséchelo. Si queda olor residual, haga más pasta y repita el tratamiento.