Las lámparas táctiles funcionan al activar un interruptor eléctrico interno cuando la capacitancia de la lámpara alcanza la capacidad del cuerpo humano. Los circuitos dentro de la lámpara detectan el cambio de capacitancia cuando alguien toca la lámpara. /p>
El interruptor eléctrico para una lámpara táctil es interno en lugar de externo como otras lámparas. Ese interruptor está conectado a un circuito que está conectado a la parte de la lámpara que se toca para encender. La capacitancia de la lámpara, o la capacidad de la lámpara para mantener la carga eléctrica, se calcula de manera que también se requiere la capacitancia del cuerpo humano para activar el interruptor. Una vez que se retira la mano de la capa externa de la lámpara, la capacitancia de la lámpara vuelve a su carga normal.
Algunas lámparas táctiles tienen la capacidad de brillar con más intensidad o atenuarse si se toca la lámpara varias veces. Estas lámparas están colocadas en un ajuste de luz particular. La luz de la bombilla se enciende y apaga varias veces por segundo, pero parece ser un brillo constante para cualquier observador. Cuando la luz es más brillante, la bombilla está recibiendo la cantidad máxima de energía que recibe en una lámpara normal. Esto elimina la necesidad de una bombilla de tres vías.
