En general, los colchones destinados a la donación deben estar limpios, sin manchas ni rasgaduras y en buenas condiciones. Sin embargo, cada organización que acepta colchones puede tener otras restricciones, por lo que es mejor consultar con ellos antes de programar una recolección. Por ejemplo, Community Warehouse acepta colchones de 15 años de edad o más nuevos, y el Proyecto Wish no quiere camas de tamaño king o de plataforma. Los colchones que se donan a organizaciones también deben estar libres de chinches y otras infestaciones de insectos.
La preparación de un colchón para la donación implica eliminar el polvo, las manchas y los olores. Elimine el polvo en un colchón usando un accesorio de tapicería al vacío, recogiendo el polvo de la parte superior, los lados y los resortes de la caja. Si los ácaros son un problema, pase un vaporizador doméstico sobre el colchón antes de pasar la aspiradora. Use un limpiador de tapicería para manchas de mascotas para eliminar las manchas difíciles, siguiendo las instrucciones para evitar dañar el material. Elija un spray desinfectante o un agente de limpieza que incluya bicarbonato de sodio para eliminar el olor.
Encontrar personas para un colchón donado puede ser difícil, dependiendo de la comunidad. Algunos lugares que podrían necesitar colchones son refugios para mujeres maltratadas o personas sin hogar. Las organizaciones que albergan a los refugiados son otra opción. La familia, los amigos y los vecinos pueden conocer a alguien que busca un colchón usado. Si la ruta de la donación falla, llévela a un centro de reciclaje para su eliminación adecuada.