Elimine el hollín de los ladrillos con una mezcla de jabón y sal y un poco de grasa para codo. El amoníaco podría ser necesario para las manchas más resistentes.
Una chimenea de ladrillo tradicional es una característica atractiva de la sala de estar. Quemar madera significa que el hollín se acumula con el tiempo, dejando marcas y manchas negras feas. Este no es un desastre fácil de limpiar, pero es posible.
Primero, mezcle partes iguales de jabón para lavar platos y sal con suficiente agua para formar una pasta. Use un paño para frotarlo en los ladrillos y luego déjelo reposar durante unos minutos. Frote la mezcla con un cepillo y luego enjuague el área con un paño húmedo.
Si las manchas persisten, es posible que se necesite una mezcla más áspera. Si este es el caso, use el método descrito anteriormente, pero use una mezcla de jabón, piedra pómez y una pequeña cantidad de amoniaco en lugar de la mezcla de sal y jabón.