Un relé del refrigerador, o el relé de inicio, arranca el compresor del refrigerador. Sin el relé, no se entrega carga eléctrica al compresor y el refrigerador no se enfría. Por lo general, los relés emiten un fuerte chasquido cuando necesitan reparación o reemplazo.
El relé se encuentra en la sección posterior inferior de la mayoría de los refrigeradores. Está protegido por la caja de la cubierta del terminal y se conecta directamente a la parte posterior del compresor. La mayoría de los relés tienen un conjunto de bobinas de cobre que, como el terminal del compresor, deben mantenerse limpios y sin corrosión. La corrosión menor se puede limpiar con un limpiador de metales, pero, como la batería de un automóvil, si la corrosión es demasiado severa, es posible que el relé deba reemplazarse.
Los relés de estado sólido son cada vez más populares. Utilizan rotores para generar la potencia necesaria para arrancar el compresor. Cuando el compresor arranca, devuelve la electricidad al relé que se mantiene mientras el compresor esté funcionando. Cuando el compresor se apaga, los rotores se vuelven más lentos y el relé se enfría y se prepara para el siguiente arranque. Una vez que el rotor gira a un 60 a 80 por ciento de su velocidad máxima, el compresor vuelve a arrancar.
