Después de la aplicación de una base de lavado, se puede aplicar poliuretano, esmalte o pintura acrílica sobre aluminio. Al preparar la pintura de una superficie de aluminio, se requiere un recubrimiento de conversión. Este recubrimiento se pulveriza sobre la superficie, se deja reposar y luego se lava con agua.
El aluminio es un metal sensible en comparación con el acero, y cuando el aluminio y el acero se juntan, se produce corrosión galvánica. Por esta razón, el aluminio siempre se debe trabajar en un área que prohíba el riesgo de contaminación del acero. Además, el aluminio solo debe lijarse con un máximo de grano p80 para evitar que las impurezas se incrusten en la superficie.
